Entrada cero. Que el mundo tiemble.

Me he estado rompiendo la cabeza durante media hora pensando cómo demonios empezar el blog. Otros que había creado antes los había empezado con algunos párrafos pseudo-literarios, presentaciones cutres o directamente sin presentarlos y yendo el grano. En cualquier caso, ninguno de ellos tenía una finalidad específica, y supongo que por eso morían tan pronto. Así que por una vez quiero imponerme a mí misma un objetivo blogguero. He ahí cual: hará cosa de unos ocho meses terminé mi primera novela. La estuve corrigiendo durante los siguientes tres, y la dejé abandonada en un cajón en los cinco restantes. Hasta ahora. 

No tengo muchas esperanzas de que la cosa funcione, pero si puedo, procuraré que este blog recoja (entre otras cosas) el proceso que voy a intentar seguir para publicarla. Desde el momento que encuentre agente literario (si lo encuentro, ejem), hasta el momento en que (quizás) pueda verla en las estanterías. Es algo ambicioso, y no tengo ni idea de si funcionará, pero si no lo hace al menos me tendrá ocupada un par de horas a la semana escribiendo los progresos y estancamientos que me vaya encontrando por el camino. Y eso, teniendo en cuenta lo monótono que está resultando el verano, ya será todo un logro. 

Obviamente tengo previsto convertir este blog en algo más a parte de una especie de bitácora. Quizás me anime a publicar algunos microrrelatos que tenga escritos, algún meme o  crítica de libros que vaya leyendo (sobretodo esto último). Quizás gaga publicidad subliminal de los foros de rol que vaya creando (cof), publique links a covers de yutuf que me hayan gustado, o suba algún diseño que haya hecho últimamente. Un poco de toh', vaya. 

En definitiva, bienvenidos a Dystopia y gracias por leer. 

N.